miércoles, 7 de diciembre de 2016

Redes: Sexo, energía y muerte

En este interesante capítulo de Redes (programa de divulgación científica en La 2 hasta el año 2013) Eduardo Punset entrevista y charla con varios investigadores y catedráticos pretendiendo resolver algunas dudas sobre la evolución de la Tierra hasta la actualidad, como ¿quién es el responsable de esta evolución? ¿Por qué existen dos sexos? ¿Por qué envejecemos? ¿Pueden las células suicidarse?
Sexo, energía y muerte.
Redes. Capítulo 395



Punset, y el espectador, descubren que el mismo responsable del envejecimiento es también responsable del sexo: se trata de las mitocondrias. Son microbios que deciden sobre la vida y sobre la muerte. A ellas les debemos el desarrollo de la Tierra desde mucho antes de la aparición del ser humano.

Entonces las mitocondrias (a modo de resumen):
  • Deciden entre el género masculino o femenino.
  • Poseen genes propios y suministran energía a las células.
  • Son imprescindibles en el campo forense, precisamente por su ADN.
  • Pueden manipular a las células para que se fusionen, lo que deriva en el sexo.

En este capítulo de Redes, se plantea además la siguiente cuestión: ¿Por qué son necesarios dos sexos distintos para llevar a cabo la reproducción en la mayoría de las especies? De la cual deriva la pregunta ¿Por qué existen dos sexos y no uno, o más de dos? Analizando esto detenidamente parece ser la peor opción para la evolución de las especies, pues la posibilidad de un único sexo o infinitos sexos sería más favorable en cuanto a la probabilidad de encontrar pareja reproductiva. Las mitocondrias son las causantes de la existencia de estos dos sexos únicos.

Llegado a este punto encontramos algo que tenemos en común con nuestra madre y no con nuestro padre, pues curiosamente estos microbios se heredan únicamente por vía materna. Además las mitocondrias son capaces de llevar a la muerte a células que han dejado de funcionar bien. Aquí se introduce el interesante concepto de "suicidio celular".

Ver Sexo, energía y muerte. Redes. Capítulo 395.


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